
La idea de usar las escamas del pez como butacas de un cine dice mucho del proceso creativo del diseño: el pez como imagen representativa de una ciudad costera ( ¡y donde se come un pescaíto frito riquísimo de verdad! ) y la disposición habitual de las butacas en una sala de cine. Los detalles y la constante observación de cuanto nos rodea son los elementos de los que hay que partir para elaborar el diseño adecuado, sea de un cartel, como en este caso, o de un logotipo, o de cualquier objeto que pretenda incorporarse a nuestro entorno.
Me parece un buen poema visual al servicio del diseño gráfico.
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