Partimos de la premisa de que, a la hora de dibujar, cada uno de los alumnos tiene un pulso, un ritmo, una línea particular e intransferible, como un DNI que no es ni mejor ni peor que el de los demás, simplemente es ÚNICO y por ello doblemente valioso.
Así que les pedí el contorno de un modelo, copiado de una de las figuras de escayola del aula, tal y como cada uno lo veía. Después, que cruzaran líneas de distintos tipos y direcciones, indistintamente sobre forma y fondo. Por último, sombrear cada espacio creado intentando aprovechar los distintos valores del negro al gris más claro del lápiz. El resultado son estos primeros trabajos que muestro aquí y que no hacen más que reafirmar mi opinión sobre el potencial artístico de todos y cada uno de nuestros alumnos.
Abril 2º D
Alejandro R. 2º E
Ángela 2º B
Carmen P. 2º D
Ana S. 2º D
Marta 2º D
Andrea B. 2º E
Estrella 2º E
José Manuel M. 2º D
Mercedes 2º D
Ana R. 2º D
Irene C. 2º B
Aurelio 2º D
Iván 2º D
Carmen A. 2º B
Javier A. 2º B
Daniel S. 2º D
José Ramón 2º E
Josué 2º C
Isabel 2º A
Lucía Bl. 2º B
Julio 2º E
Marta C. 2º A
Marta V. 2º C
María M. 2º B
Noelia 2º E
Reyes 2º B
Verónica 2º E
Estoy segura de que a Paul Cézanne (1839-1906)...
...a Juan Gris (1887-1927)...
...a Fernand Léger (1881-1955)...
...o a Sonia Delaunay ( 1885-1979), por ejemplo...
...o a Francis Picabia (1879-1953)...
...les hubieran encantado vuestros trabajos...
Desde luego, a mí sí que me gustan. ¡Enhorabuena!
No hay comentarios:
Publicar un comentario